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Vivienda
Vivienda Social
Por mucho tiempo, el foco de las políticas fue construir el mayor número de
viviendas en el menor tiempo posible, lo que permitió que muchos chilenos
tuvieran un techo donde vivir, estos últimos 3 años la reconstrucción a sido
considerablemente lenta, en años anteriores, todos saben el aporte que hemos
se ha realizado en el área de vivienda en la provincia del Linares el apoyo considerable
a esta área que impulse siendo presidente de la comisión de vivienda del senado, Sin
embargo, muchas personas obtuvieron su vivienda con lo cual satisfizo sus necesidades
primarias, con escasos espacios públicos y lejos de sus fuentes de trabajo.
En la actualidad disponemos de un instrumento de asignación de viviendas poco adecuado
y excesivamente burocrático, que impide solucionar el déficit cuantitativo y cualitativo de
la vivienda social. Además, no se ha abordado adecuadamente el uso del suelo para la vivienda social.
Chile ha llegado a un nivel de desarrollo en el que toda familia puede y debe acceder a una
vivienda bajo calidades superiores a las actuales, en tiempos de espera razonable y
ubicada en un lugar cercano a sus fuentes de trabajo. De esta forma, el problema de la
vivienda social se enmarcará en una solución integral al desarrollo urbano.
Fin al déficit de ofertas de subsidios ya asignados
Asignar un subsidio es una cosa; que el receptor llegue a tener una vivienda es
otra cosa muy distinta. Para cerrar esa brecha son las siguientes propuestas:
· Suplementar subsidios a la vivienda. Para atenuar el alto déficit de
ofertas de viviendas sobre subsidios es necesario suplementar los montos del
subsidio, con el fin viabilizar técnica y económicamente los proyectos. Esto
permitirá que las empresas terminen las obras en el más breve plazo.
·Modificar administrativamente las asignaciones de los subsidios existentes
Este mecanismo implica un cambio de paradigma desde un subsidio a la
demanda a un subsidio a la oferta. La modalidad de pago sería contra la
vivienda terminada, para eliminar la excesiva burocracia. Esto producirá
incentivos en los privados a objeto que formulen proyectos de vivienda social,
además de un incremento sustantivo en la velocidad de ejecución de los proyectos.
Esta propuesta de aplicación inmediata permitirá descomprimir la presión social que
generan los comités que por años esperan sus subsidios y otros a los que no
se les ha terminado la ejecución de sus viviendas.
Política de vivienda para grupos vulnerables
En Chile se requiere implementar un mecanismo especial de asignación y
aplicación de subsidios a grupos vulnerables, centrado en el producto final
y con precios que otorguen vialidad económica a la ejecución de soluciones
habitacionales. Lo primordial es establecer un proceso simple que reduzca
drásticamente los tiempos de ejecución. Dicho mecanismo debe ser formulado
con base en incentivos económicos y regulaciones sustentadas en la Ley
General de Urbanismo y Construcción, con exigencias mayores en los estándares
de las urbanizaciones, la superficie de áreas verdes y equipamiento en loteos.
Esta propuesta apunta esencialmente a formular un mecanismo adecuado
para desarrollar proyectos de vivienda social, que permite plantear en la agenda
pública el siguiente desafío: reducir efectivamente en los próximos 10 años el
déficit habitacional a menos de 100.000 unidades.
Planificación y Regionalización de Infraestructura
El Estado no cuenta con de una visión integral sobre el uso del territorio nacional.
Al carecer de dicha mirada, los esfuerzos realizados en forma paralela acaban por
interferir unos con otros, lo que produce una serie de inconvenientes. Un claro
ejemplo de esto son las descoordinaciones entre las inversiones del Metro y las
obras públicas viales.
Proponemos un cambio en la institucionalidad del MOP para fortalecer la Dirección
de Planeamiento, entregándole amplias facultadas para dirigir las iniciativas de inversión
pública. Nuestro foco estará en el desarrollo planificado, que cuente con una visión
completa del territorio. Asimismo, vamos a implementar un sistema descentralizado
para la ejecución de proyectos, que serán liderados por las direcciones regionales
particulares, una vez definida la obra como pertinente por la Dirección de Planeamiento
a nivel central. Las Dirección General de Obras Públicas –el ente ejecutor de las obras
estará subordinada a la Dirección de Planeamiento, quien determinará los plazos para
ejecutar los proyectos. Esta medida permitirá agilizar el desarrollo de la infraestructura,
entregándole coherencia y a la vez incorporando las sensibilidades de la zona de
influencia desde un inicio.